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Siempre me han gustado las cremas de verduras, nos sacan de apuros, son fáciles de preparar además de ser muy sanas ya que contribuyen a desintoxicar nuestro organismo al mismo tiempo que lo nutre. Esta es una crema con mucho cuerpo super deliciosa. La idea aquí hornear la mitad de las zanahorias para caramelizarlas. Esto le da un gusto riquísimo de varios sabores aunque tenga básicamente un solo ingrediente principal. Lo curioso es que puedes hacer la misma crema con auyama (calabaza) en sustitución de las zanahorias manteniendo los demás ingredientes.

Ingredientes para la crema de zanahorias

Preparación de la crema de zanahorias

Lo primero que haremos será pelar y cortar las zanahorias en cuadritos. Colocamos la mitad de las zanahorias en una bandeja para hornear y sazonamos con sal y pimienta al gusto junto con un chorrito de aceite de oliva, revolvemos y horneamos a 200°C durante unos 20 minutos, revolviendolo de vez en cuando para que se cocinen de forma pareja. Retiramos del horno cuando ya estén suaves y tengan un tono algo marrón (ya estarán caramelizadas)

Mientras tanto, ponemos a hervir el caldo en una olla grande con el jengibre pelado y cortado en pedacitos, la cebolla y el ajo también picaditos. Llevavos a fuego lento y cocinaremos esto por unos 5 a 7 minutos más o menos hasta que las cebollas estén suaves. Añadimos la otra mitad de las zanahorias crudas y cocinaremos a fuego lento durante 10 minutos hasta que estén ligeramente suaves pero no cocinadas en su totalidad.

Ahora licuaremos todo: el caldo que acabamos de hacer con las zanahorias crudas junto a la otra mitad de las zanahorias horneadas.  Corregimos de sal y pimienta si es necesario y un chorrito de aceite de oliva sobre cada porción. Agrega unos croutons justo antes de servir y adorna con unas hojitas de albahaca y si prefieres un poquito de queso parmesano. Omite los croutons y el queso si la quieres detox. Rinde para 4 personas.

Aquí puede ver la receta para preparar los croutons.